Un Verano Americano (3): Mark Twain y la crisis inmobiliaria

Vida Nueva para José Ramón







¡Os lo dije!:

Leo en El País que científicos americanos han descubierto una nueva estrella. Ellos, ajenos a mi deseo-profecía sobre JRP, le han puesto de nombre SO 102 y explican que se encuentra orbitando en torno a un descomunal agujero negro que ocupa el centro de nuestra galaxia. Parece que la importancia del descubrimiento radica en que "hace  posible estudiar con mucha precisión la curvatura del espacio tiempo allí, en las condiciones extremas del entorno de un agujero negro. Es una nueva e insólita oportunidad de verificar la teoría de la Relatividad General de Einstein, que predice cómo la masa -y el agujero negro es mucha masa- curva el espacio tiempo."
Estas complejidades científicas, tan sugerentes como difíciles, me han traído a la memoria Los relojes blandos de Dalí y la particular y elástica concepción del espacio- tiempo de José Ramón Pose, que le hacía demorarse, dar vueltas, alargarse y retrasarse imprevisiblemente; como si su reloj fuera blando, como si su espacio-tiempo fuera curvo  Sólo llegó temprano- demasiado-a la cita con la muerte, como si no hubiera podido resistirse a la sideral atracción de ese agujero, a 26000 años luz, al tomar su última curva. Pero ha llegado muy lejos y muy rápido hasta los confines de una nueva existencia en la que ya es la estrella de nuestros recuerdos.
Para colmo de sincronías Jungianas, el título original del cuadro de los relojes:

"LA PERSISTENCIA DE LA MEMORIA"